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21-09-2011, en el Día de la Primavera... flor de pejerrey
Ya
llegando al fin de la temporada 2011 y antes de encarar la
pesca de las corvinas decidimos seguir haciéndole algún tiro
más al querido pejerrey que tantas satisfacciones nos da año
a año. Esta vez ingresamos a las aguas del Río de la Plata
sur alrededor de las 14hs con el río con poca agua y en
bajante, en ese momento el viento soplaba del NO a 25km/h
aproximadamente. 3 pescadores para cubrir la nota
correspondiente, 2 porciones de mojarras vivas y unas
cuantas mojarras saladas, el cebo, el ancla de capa y todo
listo para vivir una jornada llena de sorpresas.
Navegamos 4.000 metros
para adentro a la altura del balneario municipal de
Magdalena sabiendo que la deriva nos iba a llevar hacia el
Sur, donde por experiencia personal están los mejores peces.
Notamos el agua totalmente limpia, se veía la hélice del
motor clarita abajo del agua y el cabo del ancla de capa
también por abajo del agua.
Líneas
en el agua y a esperar los piques, pasaron 20 minutos hasta
que Javier anuncia la clavada del primero, peje mediano
pescado con mojarra viva, empezamos a sumar para el cajón.
Al rato Santiago anuncia la clavada de un peje matungo a 100
metros de la embarcación, lo pudo traer 10 metros cuando
nota que la línea aflojó, al subir la línea a la embarcación
se da cuenta que el pez se había llevado la bajada de la
boya del medio, algo grande andaba dando vueltas porque
previamente trajo su línea con 3 de los 4 anzuelos sin
carnada.
Seguíamos la deriva y
empezamos a levantar pescados, el porte iba mejorando, ya el
tamaño nos iba haciendo entusiasmar alrededor de las 17
horas, después de ese receso que se suelen tomar los peces
donde no se recibe pique alguno volvieron con todo.
Empezamos a levantar matungos, y las líneas se movían todas
a la vez, como ya les avisamos en las notas anteriores, al
atardecer es donde esta la papa y dicho y hecho. Sumábamos
para el cajón tanto en cantidad como en tamaño, pescando
toda la tarde con el sol de frente, había llevadas que las
notábamos sin tener que mirar las boyas.
Para completar el día
de la primavera, fuera de todos los pronósticos, Esteban
pescando afuera de la calle de ceba, con una línea puesta en
su caña al revés, con 2 boyas que constantemente se le
juntaban, encarnando con mojarras muertas (saladas) y a 5
metros de la embarcación nota una llevada descomunal, un
arrastre que le había enredado todo en el agua, pudo clavar
y pudo traer la captura hasta nuestro lugar, este es pesado
grita, es para copo, ahí nos pusimos todos a mirarlo
detenidamente y efectivamente, clavó el pejerrey de la
tarde, al levantarlo del agua vimos que además de ser largo
era gordito, era un matungo que arrojo 54cm de largo y la
balanza anunció 1,3kg de peso. Este fue el premio a la
insistencia, después de varios días de viento donde
queríamos entrar pero nos teníamos que volver y después de
la lluvia de días anteriores, luchamos contra la poca agua
del río, entrando varios metros caminando con la embarcación
a tiro, pasamos la rompiente donde ya el agua nos deja
navegar bien, después de dos olas monumentales que rompieron
en proa haciéndonos pegar un baño de agua tibia recibimos el
trofeo al final de la jornada.
Sigue el peje dándonos
satisfacciones en ésta época del año, y nosotros con todo el
Equipo de Pesca en Magdalena tenemos el material necesario
para contarte del estado del pique jornada a jornada. Este
fue otro de nuestros relevamientos, para que desde tu casa
vivas el estado del pique en nuestras aguas.
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